Hoy que todos los bares y peluquerías de nuestra piel de toro, llenan sus conversaciones de orgullo patrio por la épica victoria ante Rusia, leo en 20minutos la noticia de la fiesta de Coria en Cáceres.
En pro de un sentimiento atávico y una tradición salvaje, mantenida a pesar de las 60.000 firmas que se recogieron en su día, se celebra esta fiesta de sangre. En ella los lugareños corren tras un toro lanzándole dardos. Por lo visto es un gran atractivo turístico, a mi entender tan asqueroso como el sexual.
La imagen está tomada del diario 20minutos
Leer más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario